martes, 6 de septiembre de 2016

Oh Woody





A veces una foto pasa por tu vida y se queda, 
se detiene el tiempo y lo significa todo, 
es el resultado de un simple fogonazo 
de una futura indigente. 

Vivian Marier, que curiosa la vida.

Sin estar presente fuiste testigo de la chispa que originó la historia.
Te imagino como a una visitante más, compartiendo espacio con el resto de almas.
Quizá te diera por fijarte e incluso sacar una foto de ese momento.
Ese instante promotor del probable incendio.

Luego llegaría el cine con sus imprevisibles giros de baile.
Pero por mucho que la banda sonora avance el tiempo sigue detenido.


Los decorados y los figurantes van cambiando
a la vez que se va el verano, mirando de reojo,
pensado en lo ilusos que somos.

Hasta que aparece Woody y coloca el vinilo en el tocadiscos,
vintage por supuesto. Con sus músicos callejeros y el Madrid más bonito.

Comienzan a sonar los primeros acordes,
aún no se puede adivinar la canción,
pero suena a ...